Como madrileña capitalina me sorprendo a menudo ante algunas manifestaciones de provincianitis aguda. Ayer, tres revistas del corazón reseñaban el romance de un actor guapito que ya se me ha olvidado con una chica a la que presentaban insistentemente como “de 28 años y de Palencia”. Como si el hecho de ser ella de esa tierra de cereales donde suelo desorientarme rumbo a Asturias fuera…
Virginia Galvin
La vida en 5 minutosAlguien de mi entorno cercano de quien no daré pistas porque se disgustaría sufre por amor como una condenada y ayer, después de varios intentos fallidos, al fin confesó. Le gusta alguien -llamémosle número 2- que a su vez está por alguien -número 3. Y número 3 “es muy guapa, no como yo”. Acabáramos. Si sólo las guapas enamoraran habría un estallido social de feas…
A Minichuki no la han invitado a un cumpleaños y está desolada. Ayer me contaba que cuando se acerca al grupito que sí irá a la fiesta se callan todos de golpe. En esos casos me dan ganas de saltarme con pértiga todas las normas ISO de la educación y en lugar de aconsejarle el consabido “no te preocupes, hija, eso nos ha pasado a…
Hoy es el Blue Monday. O sea, el día más triste del año por decreto y según un estudio “muy científico” que cruza tres variables definitivas e irrebatibles: Hace frío, no hemos cobrado aún y no hemos cumplido los propósitos que nos hicimos en plena euforia de Moet Chandon y cotillón verbenero. Vamos, que con mucho menos me invento yo una teoría y colapso las…
Soy de esas que aún no han leído “En busca del tiempo perdido”, pero sí algunas cartas muy jugosas y reveladoras del joven Proust: “Existen escritores mudos como existen volcanes dormidos, cuyo nombre infernal con resonancias sulfúreas, de fuego y muerte, también hace temblar a los hombres”, le escribe a Felicien Marboeuf, escritor sin obra que le inspiró “A la sombra de las muchachas en…
Cada noche, cuando entro por el portal de casa, temo que Vlad me entretenga con algún sucedido de la comunidad. Mi cetro de presidenta tiene sus días contados, pero amenaza con ser trepidante hasta el último segundo. Ayer, dos vecinas ancianitas escuchaban al conserje con cara de susto. Yo traté de pasar detrás del grupo, escondida sibilinamente en el cuello del abrigo. Pero había subestimado…
Nadie puede ponerse en el lugar de nadie, pero la integridad de la armadura social enclenque en la que bostezamos cada madrugada depende de eso. Ni todos somos Charlie ni nos gustaría serlo, pero aplaudimos la proclama, sencilla y fácil de repetir, porque sentimos que así debe ser, que la solidaridad nos humaniza y nos separa de las bestias. Que lo más cerca que podemos…
Hayat Boumeddiene&Amedy Coulibaly De todas las informaciones sobre los atentados de París, me llama la atención en especial la que habla de la esposa yihadista del hombre que entró en el supermercado judío, la mujer más perseguida en Francia. A menudo la violencia y la crueldad en la mujer se abordan desde la extrañeza. Como si una mujer careciese de pulsiones destructivas, crueles, asesinas. Que…
1. No se ve nada. Tropiezas, te tiran copas encima, te agarran de la cintura manos extrañas. Te equivocas de bebida, suponiendo que no desaparezca misteriosamente la tuya de la barra. Pierdes el ticket del ropero. El feo parece guapo (y viceversa). El baño no tiene luz. Ni papel. Ni demasiada higiene (que por suerte no ves bien) 2. No se oye. Si eres de…
Librería San Ginés “Cuando pienso en mi esposa siempre pienso en su cabeza. Para empezar, en su forma. (…) Como un duro y brillante grano de maíz o un fósil en el lecho de un río. Resultaba bastante fácil imaginar su calavera”. Ayer le regalé a mi adolescente el libro “Perdida” (Gone Girl), de Gillian Flynn, en un intento más de proselitismo literario con concesiones….