Mi querida Big-Bang: Camino de mi casa está el follódromo. Un lugar sórdido, que diría mi madre, pegado a la plaza de Toros, donde los solitarios transitan con sus coches, se miran entre vahos y se aparean sin solución de continuidad. Luego arrancan los motores, encienden las luces y aquí no ha pasado nada. El citado lupanar lleva el gratis total como luz de neón,…
Virginia Galvin
La vida en 5 minutosMi querida Big-Bang: El eje de la tierra de ha desplazado ocho centímetros y el de mi corazón un metro y medio. Lo primero, por efecto de un terremoto. Lo segundo también. Me gusta que me saquen de mi eje, ser móvil y hasta reversible. Me asustan los pilares de hormigón armado, el nonosmoverán, la frase rotunda y el verso concentrado. Un eje móvil es…
Mi querida Big-Bang: Algunos resucitan al tercer día y otros morimos a diario. El ciclo de la vida es fotosintético y cruel, como el del ficus benjamina. Arte efímero. Un día te levantas pletórico, saltas de la cama con cuidado de posar el pie derecho en el parquet y tres horas más tarde estás mustio y hecho fosfatina porque alguien ahí fuera te ha metido…
Mi querida Big-Bang: Una vez entré en el pasaje del terror del Parque de Atracciones. En la puerta, un señor vestido de profesional del miedo nos leyó con solemnidad las normas, advirtiendo que habría susto, pero no muerte:”y los actores nunca les tocarán”. Cagada de miedo entré con mis amigas, y al poco sentí la zarpa un hombre Lobo de plexiglás muy sobrectuado, que sin…
Mi querida Big-Bang: Cuando el escapismo entra por tu puerta el amor sale por la ventana. Siempre he preferido el término escapista a escaqueador, es más profesional, tiene más charme y le da al sujeto una pincelada de David Copperfield que pa qué. El universo está lleno de escapistas que corren como la nave de Darth Vader y no paran ni para repostar. A ti…
Mi querida Big-Bang: Mi mundo era un libro sin terminar, una tumbona al sol y un macizo dándome aire con las pestañas. Podía pesar unos 53 kilos, yo, y abierta en canal medía 1.65 si estiraba bien el cuello. Eso y un bloody Mary eran la gloria bendita. Las simples es lo que tenemos, que si la primera del periódico no lo impide transitamos felices…
Mi querida Big-Bang: Mi amiga A-3 me pide que hable de la lactancia materna para que su hermana, pediatra, recite mis versos en un congreso médico. “Chitina, le digo, si tu hermana me parafrasea la echan del gremio ipso facto. Pocas cosas hay en mi vida más funestas que la lactancia terrorista ésa”. Esa época sórdida en la que conviertes una de tus armas de…
Mi querida Big-Bang: ¡Hoy estreno mi bicicleta!. La tengo delante de mí, azul y brillante, la promesa de una regresión a la infancia y a las costras en las rodillas. Yo era una cafre y solía soltar las manos del manillar para epatar a mis amigas, que venían diligentes a recoger mis pedazos cada vez que me dejaba los cuernos contra el asfalto. “Una bicicleta…
Mi querida Big-Bang: Uno de mis hobbys más desarrollados consiste en contemplar las evoluciones de las parejas. Mi objetivo final es el desarrollo de una sesuda y explosiva teoría sobre el amor que ríete de las polémicas del chungo de Bernard Henry Levy. Mis estudios de campo tienen lugar en aeropuertos, grandes almacenes y restaurantes, tres espacios malditos donde el amor se la juega a…