…Y puede que el año más inquieto y esquivo sea indultado como se le perdona a una res su arrojo y su nobleza en una plaza que reclama la sangre y remolino según guión de Hemingway (mojito abandonado en una barra de bar, el hielo ya tardío que hace aguas). Y que haber bailado sobre el cráter de un volcán falsamente dormido sólo dejara breves…
Virginia Galvin
La vida en 5 minutosA veces me siento enferma de futuro. No sé si alguien ha puesto nombre a ese trastorno raro de sentirse tan pleno en los inicios y a la vez impaciente del qué viene después. La espera, me parece, es un fin en sí mismo. O eso es lo que siento últimamente. La humanidad podría dividirse entre los enfermos de pasado y los enfermos de futuro….
P { margin-bottom: 0.21cm; } Recuerdo el vacío que dejaban los domingos de ayer. El domingo transcurría a cámara lenta y eso no le quitaba dramatismo, sino todo lo contrario. Si salías, porque de pronto estabas en la cama y el cartel de The End te espoleaba el insomnio. Si no, porque eras una pringada sin éxito social y abonada a las mallas de algodón…
Mi sagutxo para leer a Lucía Berlín P { margin-bottom: 0.21cm; }Esperen. Déjemme explicar… Una puede robar a libro armado un arranque de Lucia Berlín, como es el caso, y comprobar segundos después que lo último que buscó ayer en internet fue la receta del morcillo para olla exprés. Como mujer de la limpieza que también soy me siento legitimada para ése y otros muchos…
Pertegaz. Canal de Isabel II “No sé qué tiene una noche oscura y fría que hace que te sientas muy cerca de alguien con quien duermes. Cuando hablas con él es como si fuerais las únicas personas despiertas de toda la ciudad“. Arranco el día de los aviones por el cielo y los soldados a pie abriendo al azar a Carson McCullers y su primer…
Paisaje tras la inundación Este agosto me huele ya a septiembre y Brontë aún no ha entendido que no hay barra libre para aliviarse por los pasillos de casa. Desconozco si a la Artista antes llamada Minichuki le vale el uniforme del colegio, me resisto a dar a la tecla de compra de libros de texto en esa web que detesta Donald Trump y sobre…
P { margin-bottom: 0.21cm; }El pueblo olía a estiércol y la casa a un potente matamosquitos que no entendía de perfumes florales. Anoche, bajando las escaleras angostas, me invadieron de pronto ambos aromas que ha amordazado el tiempo, aunque queda un remedo que estalló sin preaviso en el recodo de los peldaños de la casa que fue de mis bisabuelos, Casa Marco, porque aquí los…
El Monje en el Mar. C.David Friedrich. Gracias, R. Soy mujer absorta, soy bomba nuclear. Y entonces recibo un regalo magnífico, el broche jubiloso a unos días perdida en un campo y una Casa que voy sintiendo mía, pero que aún no se acopla a las costuras de mi cuerpo. Como esos viejos jerseys que no tiro precisamente en homenaje a su trabajo de adaptación…
Ávida de un año que me invoca despierto rodeada de abrazos y tras degollar una pesadilla, la primera de año, que me obligó a detener la madrugada y a abrir a manotazos la ventana para hacer hueco al hielo de un cierzo de navajas. El monte nos llama a otro paseo, poderoso en su manto de rocío, y el olor del café ya reverbera en…
Poco a poco la rutina regresa como un bálsamo. La noche interrumpida antes del quiebro del sol. Las lecturas breves previas al sueño que te hace caer como un púgil que besa la lona, ensangrentado (Ayer “La Musa Oscura”, de Armin Öhri (ed.Impedimenta) , arranca presentándonos a la víctima de un asesinato: una limpiadora de matadero de día y prostituta de noche. Carne contra carne….