Desde hace unas semanas recibo inquietantes mails en los que yo soy la remitente.

El asunto es “cooperación en una gran compañía” (compañia, sin tilde), o “Crecimiento de carrera”.

Dentro, cinco o seis párrafos llenos de repeticiones, faltas de puntuación e incorrecciones ortográficas y semántico sintácticas. Por ejemplo:

Ahora a muchas empresas les interesa el mercado Espanol (Por el motivo de  que ustedes son flojos)
En sus deberes del gerente estaran el acompanamiento entre tratos de clientes espanoles y las companias internacionales.

Mi otro yo considera que somos flojos. Yo considero que Español es un adjetivo y como tal no debería ir en mayúsculas. Y que además es una provocación en un país inmerso en el debate independentista. Me dan ganas de responder, airadamente, pero antes consulto al informático.

-No hagas ni caso, es un spam
-Ya, sí, pero me inquieta. ¿Estaré enviando semejantes textos a gente que me conoce y, aún peor, que no me conoce?

El informático se encoge de hombros y me advierte que no active ningún enlace. Que podría envenenar mis circuitos para siempre.

“Dos no se pelean si uno no quiere”, pienso. Pero ACOMPANAMIENTO es con Ñ de España y ESPAÑOL es con minúscula.

“Ustedes son flojos”, directamente, es una valentonada.

O sea, que mi usurpador/a no sólo se hace con mi dirección de correo electrónico sino que me insulta, sin saber que lo que más me duele es que escriba así de mal. Desazonada, insisto con el informático:

-Entiendo que te preocupe. En muchos casos, son
correos autogenerados por una máquina, traducidos automáticamente de los
originales en inglés… por eso tiene esa semántica… 

Que una máquina genere ella solita párrafos firmados por mí no me tranquiliza en absoluto. Apoderarse de tus palabras es como apoderarse de tu alma, pero eso no me atrevo a decírselo al informático porque pensará que soy una rarita con ramalazos new age. O una agitadora sintáctico-ortográfica, que es mucho más peligroso. En su lugar, le pregunto si no dispone de un arma de destrucción masiva contra clones de mujeres alteradas por la ortodoxia literaria.

-No podemos hacer mucho,
porque el Firewall no los bloquea. Eso si no entres en ningún LINK ni
envíes ningún correo a esa dirección que aparece.
 
Me parece que el Firewall ése es un mierda, sea quien sea. Si no es capaz de bloquear a un tipo que se come los acentos como yo las latas de mejillones en escabeche, es que no está preparado para las maniobras militares más simples. Contengo mis dedos, que vuelan furiosos al teclado a editar a mi clon para que, ya que va a seguir campando por sus respetos, lo haga con una calidad más aceptable. Si no de novela de altos vuelos, sí de libro de autoayuda publicado por editorial popular y puesto en destacados exhibidores de El Corte Inglés.

Luego vuelvo al mail, y a su oferta irresistible: La formacion en la empresa sera de dos semanas y es gratuita.
Al igual usted obtendra un pago fijo de 1500 euros al mes + comision por buen trabajo.

GRATUITA-PAGO-1500 EUROS-COMISIÓN 

Me doy cuenta de inmediato que mi usurpador tiene mucho más que ofrecer que yo misma. Una mente perversa, sin duda, ha decidido aniquilar mi ego literocéntrico y convertirme en voceadora de ofertas irresistibles de alcance popular. Como esos gitanos del Rastro que llaman a las Maris agitando bragas acrílicas a un euro. 

Después de un buen rato sopesando la reacción menos lesiva, decido agrupar todos los mails, marcarlos y dar a la tecla de eliminar.

Asumo que nunca más entraré a formar parte de una gran compañia, sin acento. Y que un informático es ese gurú que no te arregla la vida sino que te aturde con terminología ajena a tu diccionario para que sigas amándolo por pura necesidad, con ese amor Spam sin reglas semánticoortográficas que tu Firewall no puede bloquear.