SEO

Debo mejorar mi SEO. Es urgente y necesario. Una herramienta diabólica e impertinente llamada Woorank me lo ha sugerido entre una maraña de indicaciones que apenas entiendo.

Mi blog tiene un 5 pelado en SEO (50 points sobre 100). Un “suficiente” (lo que mi hija la Artista antes llamada Minichuki entendió durante años en sentido literal, de manera que se sorprendía cuando se le regañaba por sus notas plagadas de ellos).

En mi caso, siempre me pareció que un suspenso era más digno y contundente, aunque desde luego más dramático. A nivel madre he cambiado de parecer. Igual que ahora apoyo la moción de tomar fruta como postre o el “de entrada no” cuando huelo una envolvente para salir de botellón (“ir a un espacio abierto”, lo llaman).

No me desvío. Necesito un experto/a en SEO más que un bote de cúrcuma antinflamatoria o una estufa de pellets para mi casa con patio.  Hacer que me entiendan las máquinas, no sólo vosotros. Ser presa facilona para la araña de Google. SEO se parece a SOS, y ahora lo entiendo. Escribir y alimentar este blog para mis ilustres lectores nicho es un milagro. Como tirar una botella al mar y que la encuentren doscientos años después y se viralice.

¿Cómo viralizar un pensamiento? ¿Alguien ahí fuera, una masa ingente de inquietos, podría pasarlo bien en estos Agujeros Negros pero no se ha enterado todavía? ¿Existe una comunidad abierta a hacerse preguntas sobre la identidad, moda, los huevos fritos en el liderazgo, el neofeminismo, el metacine, la maternidad, los misterios de una exposición o la sostenibilidad? 

-Soy una autora sostenible y busco quien me dé alas. Un/a SEO expert, concretamente.
-Pues muy bien, bonita. Busca.

-Soy una inquieta con millones de preguntas que articulan conatos de respuestas. Finales abiertos porque la vida no se contiene en tres destellos de palabras. Es esa masa que siempre se te desborda al pasarla por la batidora.
-¿No tenías una Thermomix? Úsala para algo más que para hacer gazpacho de agosto. Te sale carísimo.

YouTube

-Este blog no es nada práctico. Así que ¿está condenado a pudrirse en vida?
-It´s up to you.

-Ser comercial o no ser. (No hablamos de dinero, sino de visibilidad)
-Vuelve a Shakespeare. Es la clave de Todo.

-El blog ha muerto, ¿viva YouTube?
-¡Viva!

La culpa de todo esto es de mi amigo R. es el hombre que me susurra cada tres meses y por teléfono desde Barcelona. Cree que debo tener un canal de YouTube y me lo argumentó con tanta solvencia que me lo he creído.  Ser agitador es eso. “Te sobran contenidos, sácalos a pasear”, me dijo él ayer. Y algo que no me había planteado siquiera empieza a cobrar forma y me asalta el sueño y el despertar.

Soy autora nicho. Mujer nicho. Madre que a veces se metería en un nicho. Y desde hoy tengo una plegaria nicho: ¡NECESITO QUE ALGUIEN ME AYUDE CON EL SEO!

Razón, aquí. (Escribidme, por favor)
He tirado mi botella, espero que no sean 200 años de espera. De lo contrario, nos vemos en la buija.